Los bancos dicen que el plan anunciado por el nuevo ministro de Economía no está a la altura de lo que se requiere para contener la crisis económica
Para Wall Street, la designación de Sergio Massa al frente del ministerio de Economía, con la absorción de las carteras de Producción y Agricultura, Ganadería y Pesca, brindó un poco de aire y generó expectativa con respecto a la posibilidad de adoptar las medidas necesarias para contener la crisis y evitar un mayor deterioro de la economía. Tras los anuncios del ministro, difundieron informes críticos.
Así se plasmó en una serie de comunicaciones de bancos como JP Morgan, Goldman Sachs, AR Partners y BTG. Sus opiniones fueron formadas incluso antes de que abran los mercados. El primero, por ejemplo, aseguró que las “expectativas eran altas, pero el set de orientaciones y medidas de políticas públicas anunciadas se quedaron cortas, probablemente, para estabilizar los desequilibrios macroeconómicos”.
“Los anuncios carecen, una vez más, del necesario respiro y consistencia que exigen los desafíos actuales, muy por debajo de lo que el plan de estabilización requeriría en la calamitosa situación macroeconómica actual”, sentenció.
Los gigantes de Wall Street se refirieron a una oportunidad perdida por parte de Massa. Goldman Sachs transmitió que el flamante ministro es visto como uno de los pilares de la coalición de gobierno (junto con el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner), “por lo que el ministro tiene más capital político y estatura que los dos ministros de Hacienda anteriores (Martín Guzmán y Silvina Batakis)”. “A nuestro juicio, las medidas anunciadas son decepcionantes y no llegan a un plan integral y coherente para reequilibrar la economía argentina”, evaluó.
Otro de los puntos que critican los bancos y financieras estadounidenses es la falta de consistencia de la presentación de Massa. “El nuevo ministro anunció un conjunto de medidas económicas para acumular reservas internacionales y reducir el déficit fiscal, comprometerse con el programa del FMI. Massa parecía darse cuenta de la fragilidad del contexto, pero sus anuncios no tuvieron sustancia”, comunicaron desde BTG.
“La meta de déficit de 2,5% no tenía medidas para respaldarla, y el congelamiento del financiamiento del BCRA no tiene fuentes alternativas de financiamiento. El plan es probablemente agotar la participación de los bancos en las ventas del Tesoro, por lo tanto, expandirse a través de Repo/Leliq en lugar de transferencias directas, con un resultado idéntico”, continuó el banco.


